Estas fotos me las pasó Flor hace ya varias semanas pero no me puse a editarlas hasta hoy, la reina de la procrastinación nunca se va del todo. Este es uno de los outfits que usé para NYFW en febrero pasado. Ese día hacía muchisimo frío y las fotos que sacamos no fueron muy productivas pero pude rescatar varias para mostrarles algo sobre mi fórmula para combinar prendas negras y que no quede una masa amorfa sin onda. Si quieren ver más de ese día, acá están los vlogs de la semana de la moda de Nueva York, en caso de que aún no los hayan visto
No obstante este es un look bastante casual que usaría para casi que cualquier lugar, tiene dos elementos claves que para mi son importantes para sumar interés visual: Texturas y estampados.
Colores
Tanto a la hora de usar conjuntos monocromáticos como si queremos elevar algo de todos los días, combinar texturas y estampados es clave. Para combinar estampados, siempre tiene que haber un color predominante que los una a todos -en este caso negro- y otro que sirva como acento -en este caso, blanco-
La forma más fácil de usar dos patrones distintos es siguiendo la misma paleta . Trabajar con la misma familia de colores va a darle unidad a dos estampas separadas, podés empezar siempre por blanco y negro ya que es un dúo clásico. En este caso, es mejor mantener los accesorios neutrales o para darle ese pop y que resalte, podés optar por un algún color brillante.
El rojo y el color anaranjado del leopardo son ambos colores cálidos entonces no chocan con el resto del conjunto pero al mismo tiempo, también quedaría bien si el fondo del buzo fuese de color como azul porque el animal print a esta altura funciona como neutro.
Proporciones
Otra cosa muy importante para combinar texturas y estampados es la proporción del print en cuestión, alguno de los dos debe ser predominante del otro. Es decir, uno más grande y uno más chico: como por ejemplo, un floral fuerte con unas rayas finitas. También sirve para usar el mismo print en distintas escalas. Visualmente hay uno más imponente que el otro y eso es lo que le da armonía.
Aplicamos la misma regla para el volumen. Si tenemos mucho volumen en la parte de arriba, hay que tener menos en la parte de abajo. El blanco de las zapatillas más su volumen, actúa como la plasticola de todo lo demás. Así juntamos los tres pilares: texturas, colores y proporciones.
Texturas
Por otro lado, usar lana, cuero y piel (todo sintético) en un mismo look hace que la luz pegue de distintas formas entonces hay varios planos en un solo conjunto mientras que si fuese todo de la misma textura y color, eso se perdería y el resultado sería muy aburrido. Muchas veces le tenemos miedo a estas telas porque se escapan de lo que estamos acostumbradxs a usar pero siempre digo que hay que tomar riesgos. La vida es corta para usar ropa aburrida.
Si no te animás a combinar texturas y extampados, la forma más fácil es incorporarlo de a poco. Funciona como todo, hacer algo progresivamente es lo mejor para aclimatarnos y eventualmente, poder subir de nivel. Primero probá con los accesorios: zapatos, carteras, cinturones. (acá hay una ayuda para aprender a comprar inteligentemente) La ropa tiene que ser una forma de expresión y diversión continua. Desarrollá tu estilo personal, probá, jugá con tu armario. Si lo que te ponés no te hace sentir bien, ni te sentís cómodx, no vale la pena.
Abrigo: Romwe // Pantalón: H&M // Buzo: Zara // Zapatillas: Fila // Bufanda: Isadora
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